Reglamento REACH
El Reglamento (CE) nº 1907/2006 (REACH) tiene como objetivo fundamental asegurar un elevado nivel de protección de la salud humana y el medio ambiente, a la vez que se fomenta la competitividad y la innovación en la industria química y se promueve el uso de métodos alternativos para evaluar las propiedades peligrosas de las sustancias químicas.
Uno de los mayores alicientes del Reglamento REACH es incrementar la información existente sobre los efectos peligrosos de las sustancias. Se basa en el principio de que corresponde a los fabricantes, importadores y usuarios intermedios garantizar que solo se fabrican, comercializan o usan sustancias que no afectan negativamente a la salud humana o al medio ambiente.
Esencialmente, comprende cuatro procesos:
- Registro de sustancias químicas como tales, en forma de mezclas o contenidas en artículos, fabricadas o importadas en la Unión Europea, a partir de 1 tonelada/año.
- Evaluación de sustancias por parte de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA) y de los Estados miembros.
- Autorización de sustancias extremadamente preocupantes (entre otras, carcinogénicas, mutagénicas y tóxicas para la reproducción).
- Restricción a nivel comunitario.
Para gestionar los aspectos técnicos, científicos y administrativos y coordinar todo el sistema, se ha establecido en Helsinki la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA).